Cultivo de cilantro: Guía completa paso a paso

Si estás pensando en cultivar cilantro en casa, estás a punto de descubrir una de esas hierbas que transforma cualquier plato con su aroma fresco y picante. En España el cilantro es indispensable en la cocina de Andalucía, las Islas Canarias y, cada vez más, en mesas de Valencia y Madrid. Además de su sabor, aporta vitaminas A, C y K, y su consumo regular ayuda a la digestión.

Aunque el cilantro tiene requerimientos moderados, su tendencia a espigarse (bolting) y su sensibilidad al calor pueden asustar a principiantes. No te preocupes: con la información adecuada cualquier vecino con una maceta o un rincón del huerto podrá cosechar hojas verdes durante varios meses. En esta guía vamos a cubrir desde la preparación del sustrato hasta la recolección, pasando por siembra, riego, fertilización, control de plagas y consejos de asociación.

1. Requisitos de cultivo

Clima y temperatura

El cilantro prefiere climas templados, con una temperatura óptima entre 15 °C y 21 °C. Cuando las noches superan los 25 °C, la planta acelera el espigado, por lo que en el sur de España (Almería, Granada) es mejor sembrar en otoño o invierno. En la zona atlántica (Galicia, Asturias) el rango de temperatura es más amplio, lo que permite cultivar desde la primavera hasta principios del otoño.

Luz solar

Necesita 4‑6 horas de sol directo al día. En climas muy calurosos, una exposición parcial de sombra a la tarde (por ejemplo bajo una alfalfa) protege la hoja y retrasa el bolting. En la meseta (Madrid, Castilla‑La Mancha) la exposición solar completa es beneficiosa siempre que el riego sea constante.

Suelo y pH

El cilantro se adapta a suelos ligeros y bien drenados. Un pH entre 6.0 y 6.8 favorece la absorción de nutrientes y reduce el riesgo de enfermedades radiculares. En suelos arcillosos, mezclar una parte de arena gruesa y 30 % de compost bien descompuesto mejora la aireación. Un puñado de perlita en el sustrato de maceta asegura un drenaje adecuado.

Espacio y macetas

Las plantas forman una roseta compacta; el espaciado recomendado es de 20‑25 cm entre plantas. Si decides cultivarlas en maceta, el volumen mínimo es de 10 L para evitar que la raíz se encoja. En balcones, una bandeja de 30 × 30 cm con sustrato suelto basta para 4‑5 plantas.

2. Siembra o plantación

Cuándo sembrar según zona

• Mediterráneo (Andalucía, Levante): siembra en octubre‑noviembre (invierno suave) o en febrero‑marzo (finales de invierno).
• Meseta interior (Madrid, Castilla y León): comienza en marzo‑abril cuando el suelo alcance 10 °C y las heladas hayan cesado.
• Atlántico (Galicia, Cantabria, País Vasco): aprovecha la humedad de abril‑mayo; la temperatura del suelo debe estar entre 12‑15 °C.

Siembra directa vs semillero

El cilantro se planta directamente en el huerto, pues sus raíces son poco tolerantes al trasplante. Si utilizas semillero, hazlo en bandejas de 10 × 20 cm, cubriendo las semillas 1‑2 mm de sustrato y manteniendo la humectación. Germina en 7‑14 días a 15‑20 °C. Tras la aparición de dos pares de hojas verdaderas, trasplanta con mucho cuidado, dejando intactas las raíces.

Cuidados de la plántula

Una vez germinada, riega con un chorrito suave para evitar encharcar. Cuando la planta alcance 5 cm de altura, aplícales un fertilizante líquido diluido ½ cucharadita por litro (NPK 10‑10‑10) cada 15 días. Esto refuerza el desarrollo foliar antes de que empiece la fase de producción.

Qué buscar al comprar plantones

Si prefieres comprar plantones, elige hierbas verdes sin flores ni pimientos. El tallo debe ser firme, las hojas intensas y sin manchas amarillas. Un buen plantón tiene 15‑20 cm de altura y un buen sistema radicular visible al sacudir ligeramente la maceta.

3. Cuidados durante el cultivo

Riego

• Frecuencia: 0,5‑1 L por planta cada 2‑3 días en primavera; aumenta a 1‑1,5 L en verano si las temperaturas superan los 24 °C.
• Método: Riega al pie de la planta con regadera de pico fino o sistema de goteo; evita mojado de las hojas para prevenir hongos.
• Señales de exceso o falta: hojas amarillentas y caídas indican exceso; hojas con bordes marrones y crecimiento lento indican escasez.

Fertilización

1. Inicio (semilla‑plántula): 10‑10‑10 a razón de ½ cucharadita por metro cuadrado cada 15 días.
2. Desarrollo (cuando aparecen primeras flores): cambia a 5‑10‑15 (más potasio) para fomentar la producción de hojas y retrasar el espigado.
3. Aplicación: disuelve el fertilizante en un litro de agua y riega como de costumbre. Evita fertilizar en exceso, pues la planta puede volverse más susceptible a plagas.

Control de hierbas y mantillo

El cilantro crece rápido y compite con malezas. Coloca una capa de paja o hojas secas de 5‑8 cm alrededor de la roseta. El mantillo retiene humedad, reduce la evaporación y suprime el crecimiento de hierbas. Si aparecen raíces emergentes, arráncalas con la mano para evitar que compitan por nutrientes.

Entutorado (opcional)

En climas ventosos (Costa de Cádiz o La Coruña) una pequeña estaca de 30 cm colocada al lado de la planta ayuda a mantener la roseta erguida y a evitar que el viento rompa los tallos. Ata con una cuerda de algodón suelta para no dañar la hoja.

Poda y cosecha continua

Corta las hojas externas con tijeras de podar cada 7‑10 días cuando la planta tenga al menos 10 cm de altura. La poda estimula el rebrote y prolonga la vida útil. Evita cortar más del 50 % de la masa foliar en una sola sesión, pues la planta necesitará tiempo para recuperarse.

Prevención del espigado (bolting)

• Temperatura: cuando los días superan los 24 °C y las noches >18 °C, el cilantro tiende a florecer.
• Fotoperiodo: en regiones con días muy largos, el espigado llega antes.
• Solución práctica: si observas un crecimiento alargado del tallo central o la primera pequeña flor, corta el tallo justo antes de que se abra la corona. Esto retrasa la producción de semillas y permite seguir cosechando hojas.

Manejo de la humedad del suelo

En zonas atlánticas con lluvias frecuentes, verifica que el sustrato no retenga agua. Si notas manchas amarillas en la base de la planta, mejora el drenaje añadiendo arena gruesa o eleva la bandeja usando patas de plástico.

4. Calendario de cultivo regional

Zona mediterránea / sur (Andalucía, Murcia, Valencia)

• Siembra directa: octubre‑noviembre (invierno suave) o febrero‑marzo (finales de invierno).
• Trasplante (si usas semillero): a principios de abril cuando el riesgo de helada sea nulo.
• Cosecha: de marzo a julio en la siembra de otoño; de junio a octubre en la de primavera. El ciclo completo dura 4‑5 meses.

Zona interior / meseta (Madrid, Castilla)

• Siembra directa: marzo‑abril cuando el suelo alcance 10 °C.
• Trasplante: mayo al confirmarse temperaturas nocturnas superiores a 12 °C.
• Cosecha: desde junio hasta septiembre. En años de veranos muy calurosos, la cosecha se adelanta y el espigado aparece antes.

Zona atlántica / norte (Galicia, Asturias, Cantabria)

• Siembra directa: abril‑mayo (suelo 12‑15 °C).
• Trasplante: rara vez necesario; si se usa semillero hacerlo en mayo.
• Cosecha: julio a noviembre, gracias a la humedad constante que retrasa el bolting. El ciclo completa cerca de 5‑6 meses.

5. Problemas comunes y soluciones

Plagas

• Pulgón: pequeños insectos verdes que se concentran en brotes jóvenes. Solución: rociar con jabón potásico al 1 % (1 cucharada en 1 L de agua) cada 7‑10 días y fomentar la presencia de mariquitas o pájaros insectívoros.
• Mosca blanca: alas translúcidas que aparecen bajo la hoja. Control: trampa adhesiva amarilla colgada a 30 cm del suelo y solución de ajo (1 diente triturado en 1 L de agua, dejar reposar 24 h y pulverizar).
• Ácaros rojizos: manchas amarillas y telarañas finas. Remedio: aceite de neem al 2 % (2 cucharaditas en 1 L) en la madrugada, cuando la temperatura sea inferior a 20 °C.

Enfermedades

• Mildiu (Peronospora): manchas amarillas que se expanden y lateran con polvo gris. Prevención: no mojado de hojas, abrir el espaciamiento y aplicar calda bordeles (cobre 0,5 % en agua) cada 15 días.
• Botrytis (moho gris): aparece en clima húmedo, con manchas blandas y olor a humedad. Tratamiento: eliminar hojas afectadas y rociar con extracto de ajo (30 ml por 5 L) cada 10 días.
• Podrido de raíz: raíz marrón y descompuesta, típico de suelos mal drenados. Solución: mejorar el drenaje con arena gruesa y evitar riegos excesivos; si la planta está muy afectada, sustitúyela.

Problemas fisiológicos

• Espigado precoz: tallo central alargado con pequeñas flores. Causa: exceso de calor o fotoperiodo largo. Acción preventiva: sembrar en otoño, mantener riegos regulares y cortar el tallo antes de que florezca.
• Hojas amarillas: suele indicar deficiencia de nitrógeno. Solución: aplicar fertilizante nitrogenado (urea 30 % N) a 5 g por m² cada mes o usar compost de leguminosas.

6. Cosecha

El cilantro está listo para cosechar cuando las hojas miden entre 8‑12 cm y el olor es intenso. La señal más clara es que la planta no muestra flores; una vez que aparecen, el sabor se vuelve amargo. Corta las hojas externas con unas tijeras, dejando intactas las hojas interiores para que la planta siga creciendo. La cosecha se realiza cada 7‑10 días y puede prolongarse hasta que el espigado sea inevitable.

Si prefieres cosechar todo el tallo, corta la planta a 15 cm del suelo y úsala fresca o congelada. Para conservar más tiempo, blanquea rápidamente en agua caliente y sécala en bandejas; así tendrás cilantro deshidratado para usar todo el año.

7. Consejos finales y trucos

Asociaciones beneficiosas

• Tomate y pimiento: el cilantro repele algunos áfidos que atacan a estos cultivos.
• Zanahoria y rabanito: sus raíces profundas no compiten y el cilantro actúa como repelente de mosca de la zanahoria.
• Lechuga: sombrilla natural que protege a la lechuga del sol directo y mejora la humedad del suelo.

Variedades recomendadas para España

1. ‘Cilantro Santo’: resistente al calor, ideal para el sur y la zona mediterránea.
2. ‘Cilantro de hoja lisa’: hojas más anchas y sabor suave, perfecto para huertos urbanos de la península.
3. ‘Cilantro Espacial’ (variedad híbrida): tolera temperaturas de 30 °C y se mantiene verde más tiempo.

Trucos del hortelano

• Riego por osmosis inversa: si el agua de grifo es dura, usar agua filtrada evita la acumulación de sales que pueden amarillear las hojas.
• Sombra temporal: coloca una malla anti‑UV de 30 % sobre la parcela en los días más calurosos; la producción de hojas se multiplica en un 20 %.
• Rotación de cultivos: después de cosechar cilantro, planta leguminosas (guisantes, lentejas) en la misma zona; así recuperas nitrógeno del suelo y reduces la presión de plagas.

Errores comunes a evitar

• Sembrar en exceso: una densidad alta genera sombra interior y favorece el moho.
• Riegos abundantes al atardecer: crea ambiente húmedo que favorece el mildiu.
• No podar: dejar que la planta florezca demasiado reduce la calidad del sabor y la producción de hojas.

8. Conclusión

Cultivar cilantro en España es sencillo y gratificante siempre que sigas los pasos básicos: elige la época adecuada según tu zona, prepara un suelo ligero con buen drenaje, riega de forma regular y controla las plagas con soluciones ecológicas. El desafío principal es evitar el espigado mediante una buena gestión del calor y una poda oportuna.

Con la información de esta guía tendrás todo lo necesario para disfrutar de hojas frescas y aromáticas durante varios meses, aportando sabor a tus platos y color a tu huerto. ¡Manos a la tierra y a cosechar ese cilantro que tanto has deseado!