Cuánto crece una higuera: tamaño, altura y desarrollo completo

Introducción

Si alguna vez te has preguntado cuánto crece una higuera en el jardín, no estás solo. Esta árbol frutal, muy apreciado en la Mediterráneo, puede pasar de ser un arbusto bajo a una sombra de varios metros según la variedad y el lugar donde lo plantes. Conocer su altura típica y su variabilidad es fundamental para decidir dónde ubicarlo, cuánto espacio dejar entre plantas y qué tipo de soporte (si lo necesitas) instalar.

En este artículo desglosaremos las dimensiones reales de la higuera, su ritmo de crecimiento a lo largo del año y los factores que hacen que unas lleguen a los 8 m mientras otras se quedan bajo los 3 m. Todo ello con datos concretos para que planifiques tu huerto sin sorpresas.

Dimensiones detalladas

Altura

Una higuera adulta suele situarse entre 3 m y 8 m de altura, aunque la gama más frecuente en huertos familiares está entre 4 m y 6 m. Las variedades enanas, como la “Petite Figue”, rara vez superan los 2 m, mientras que los clásicos “Brown Turkey” o “Violeta de Castilla” pueden alcanzar 7 m o más en climas cálidos. Para ponértelo en perspectiva, una higuera de 5 m equivale aproximadamente a la altura de una persona de estatura media más la longitud de su brazo extendido.

En zonas con inviernos severos, como la meseta castellana, la altura máxima suele reducirse unos 30 cm respecto a la costa de Málaga, donde el clima permite un desarrollo más exuberante.

Anchura y copa

La copa de la higuera se extiende entre 4 m y 6 m de diámetro, formando una sombra redonda que cubre una superficie de 12 m² a 28 m². Esta expansión horizontal obliga a mantener una separación mínima de 5 m entre dos ejemplares para evitar que compitan por luz y aire. En patios urbanos, se recomienda podar la copa a 3 m de diámetro para no bloquear la ventilación ni la vista.

Sistema radicular

El raíz de la higuera es bastante profunda: los taproots pueden llegar a 1,5 m en su fase madura, mientras que las raíces laterales se distribuyen en los primeros 60 cm del suelo. Esta característica la hace apta para suelos profundos y bien drenados, pero también la vuelve sensible a la compactación. En macetas de al menos 200 L se logra un desarrollo radicular aceptable, aunque la planta nunca superará los 2,5 m de altura.

Fruto

Los higos alcanzan entre 4 cm y 7 cm de longitud, con un peso de 30 g a 70 g cada uno. En climas templados, una planta productiva puede producir entre 150 y 250 higos al año, mientras que en áreas más frías la cifra baja a 80‑120 frutos. La calidad del fruto depende también de la exposición solar y la fertilidad del suelo.

Ritmo de crecimiento y etapas

El ciclo de la higuera se extiende a lo largo de varios años, pero el desarrollo visible se concentra en los primeros 3‑5 años después de la plantación. En la fase de plántula (primeros 6‑8 meses), la planta alcanza unos 30 cm de altura y desarrolla las primeras hojas compuestas.

Durante la fase vegetativa (años 1‑3), el crecimiento es rápido: la higuera añade entre 45 cm y 80 cm de altura cada primavera, siempre que la temperatura se mantenga entre 15 °C y 28 °C y haya al menos 6 h de sol directo al día. El mayor impulso ocurre entre abril y junio, cuando la longitud total puede pasar de 2 m a 4 m en tan solo dos meses.

A partir del cuarto año, la planta entra en una etapa de madurez estructural: la altura incrementa más lentamente (10‑20 cm por año) y la energía se destina a la formación de la copa y la producción de frutos. En climas cálidos, el pico de crecimiento se sitúa en mayo‑julio, mientras que en zonas más frías, como la zona cantábrica, el máximo se registra en julio‑agosto.

Factores que influyen en el tamaño

Variedad genética

Existen cientos de cultivares de higuera. Las enanas (p.ej. “Petite Figue”) están diseñadas para macetas y nunca superan los 2 m. Las variedades estándar, como “Brown Turkey”, llegan a los 6‑7 m bajo buenas condiciones, y los portainjertos vigorosos (p.ej. el ‘Ficus carica’ sobre ‘Robinia pseudoacacia’) pueden alcanzar los 8 m o más. Elegir la variedad adecuada es el primer paso para controlar el tamaño final.

Condiciones climáticas

La temperatura óptima para el crecimiento vegetativo está entre 18 °C y 26 °C. Por debajo de 10 °C, la expansión se detiene; por encima de 35 °C, la planta sufre estrés hídrico y el desarrollo se ralentiza. En la zona atlántica (v. Gijón), el crecimiento suele ser más lento y la altura media se sitúa alrededor de 4,5 m, mientras que en la zona subtropical de Málaga la higuera puede superar los 7 m gracias a veranos largos y soleados.

Cuidados y nutrición

Un riego regular pero sin encharcar favorece un sistema radicular profundo. En periodos secos, un aporte de 30‑40 L de agua por m² cada semana mantiene la planta vigorosa. La fertilización con N‑PK 10‑10‑10 (o abono orgánico rico en nitrógeno) estimula la altura y la copa, mientras que el exceso de nitrógeno en suelos pobres puede producir ramas largas y débiles. Un fertilizante equilibrado cada primavera y otro en otoño mantiene el crecimiento estable.

Poda y entutorado

Podar la copa a mediados de invierno (enero‑febrero) reduce la altura aproximadamente 1‑1,5 m, facilitando la recolección de frutos y mejorando la ventilación. La poda de formación en los primeros tres años permite guiar la planta hacia una estructura más compacta. En huertos urbanos, usar un entutorado de madera o acero ayuda a controlar la expansión vertical y evita que ramas pesadas se rompan bajo el peso de los higos.

Crecimiento en diferentes contextos

En suelo abierto (huerto)

En un huerto con suelo profundo (≥ 60 cm) y buen drenaje, una higuera estándar puede alcanzar su altura máxima de 7‑8 m y una copa de 6 m de diámetro. La disponibilidad de espacio permite que las raíces se desarrollen libremente, lo que se traduce en mayor producción de frutos y una mayor resistencia a sequías.

En maceta o contenedor

Cuando la higuera se cultiva en una maceta de 200 L (aprox. 60 cm de diámetro y 70 cm de profundidad), el crecimiento se ve limitado: la altura rara vez supera los 2,5 m y la copa se mantiene alrededor de 2 m. Es esencial usar sustrato ligero, agregar perlita para mejorar la aireación y fertilizar cada 6‑8 semanas con abono líquido. Este método es idóneo para terrazas de Sevilla o Valencia, donde el espacio a ras de suelo es escaso.

En invernadero

Cultivar la higuera bajo invernadero permite suavizar las heladas y extender la temporada de crecimiento. En la zona continental de Madrid, una higuera en invernadero puede ganar 15‑20 cm de altura extra al año, alcanzando los 6 m en cinco años, algo que en exterior se quedaría en 4,5 m. El control de temperatura y humedad favorece una mayor producción de higos, pero hay que vigilar la ventilación para evitar problemas de hongos.

Conclusión

En resumen, una higuera bien elegida y cuidada puede variar entre 3 m y 8 m de altura y entre 4 m y 6 m de diámetro de copa. Los factores más decisivos son la variedad genética y el clima de la zona, aunque la nutrición y la poda pueden afinar el tamaño final.

Para planificar tu huerto, determina primero el espacio disponible: si cuentas con al menos 5 m entre plantas, opta por una variedad estándar; si el área es limitada, elige una enana o cultiva en maceta grande y poda regularmente. Con estos datos, tendrás la confianza necesaria para integrar la higuera en tu jardín y disfrutar de su sombra y sus deliciosos frutos durante muchos años.