Cuándo plantar berenjena: calendario por zonas de España

Si quieres que tu berenjena alcance un tamaño jugoso y una piel brillante, el momento de la siembra es esencial. Cuándo plantar berenjena depende de la temperatura del suelo, la llegada de las últimas heladas y, por supuesto, de la zona climática donde estés. Plantarla demasiado pronto la expone a heladas que rompen las raíces; plantarla demasiado tarde reduce la ventana de cosecha antes del intenso calor del verano. En España, la gran diversidad climática obliga a adaptar las fechas a cada región para lograr una producción saludable.

Mejores meses para plantar – desglose regional

Zona mediterránea (costa levantina, Cataluña costera, Baleares, Andalucía litoral)

En la costa mediterránea (Valencia, Murcia, Alicante, Tarragona y Málaga), el suelo suele superar los 15 °C a principios de marzo. Cuando la temperatura nocturna se mantiene por encima de 10 °C durante una semana, ya puedes trasplantar los plantones. La ventana óptima va de mediados de marzo a principios de mayo.

• Marzo‑abril: primera siembra, ideal para cosechar en julio‑agosto.
• Julio‑agosto: segunda plantación tardía, que dará una cosecha en octubre‑noviembre si el verano no supera los 38 °C.

En esta zona la lluvia es escasa en verano, así que prepara un riego por goteo desde la siembra para evitar estrés hídrico.

Zona continental (Madrid, Castilla y León, Castilla‑La Mancha, Aragón interior)

La meseta central sufre heladas tardías hasta mediados de mayo. La regla de oro es esperar a que la última helada haya pasado y que el suelo alcance al menos 16 °C a 10 cm de profundidad. La fecha segura suele ser después del 15 de mayo, aunque en años cálidos puedes adelantar a finales de abril.

• Finales de abril‑mayo: ventana principal.
• Junio: plantación tardía para cosechar en septiembre‑octubre, siempre que el verano no sea extremadamente seco.

En la continental, protege los plantones con campanas de plástico durante las noches más frescas y aplica una capa ligera de mantillo para conservar la humedad.

Zona atlántica (Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco)

El clima atlántico se caracteriza por temperaturas más frescas y una humedad constante. El suelo suele llegar a 14 °C a principios de mayo, y las mínimas nocturnas rara vez bajan de 8 °C después de esa fecha. Por ello, la primera siembra se plantea para mayo‑junio, con cosecha entre agosto‑octubre.

• Mayo‑junio: plantación segura.
• Julio: segunda oportunidad, aunque la producción será más ligera y la fruta puede quedar menos brillante.

Aprovecha la lluvia natural, pero vigila la aparición de hongos; un buen drenaje y una rotación de cultivos ayuda a evitarlos.

Sur interior (Extremadura, Andalucía interior)

En estas regiones el riesgo de helada desaparece a finales de marzo, mientras que el calor se intensifica a partir de julio. El suelo supera los 18 °C a mediados de abril, lo que permite iniciar la plantación ya en abril‑mayo.

• Abril‑mayo: primera ventana, cosecha abundante de julio a septiembre.
• Junio‑julio: plantación tardía para una cosecha de octubre‑noviembre, siempre que el riego sea constante.

El suelo tiende a ser más calcáreo; enmienda con compost y yeso agrícola para mejorar la estructura.

Canarias y zonas subtropicales (islas Canarias, litoral de Málaga‑Granada)

Gracias al clima subtropical, la berenjena puede sembrarse casi todo el año. En las islas, la temperatura del suelo se mantiene entre 20‑25 °C durante todo el año, por lo que la plantación se puede hacer en cualquier mes, siempre que se evite el pico de lluvias de octubre‑noviembre que podría provocar podredumbre de raíces.

• Todo el año, excepto el período lluvioso en Canarias.
• En la costa de Granada, la mejor época es abril‑octubre, cuando las noches no bajan de 15 °C.

Señales para saber cuándo plantar

No te guíes solo por el calendario. Observa los siguientes indicadores:

• Temperatura del suelo: inserta un termómetro a 5‑10 cm de profundidad. Cuando marque 15 °C o más (mediterránea) o 16‑18 °C (continental), el suelo está listo.
• Últimas heladas: consulta los datos de la estación meteorológica local. Si en los últimos 7 días no ha bajado de 2 °C en la meseta, la amenaza ha pasado.
• Temperaturas nocturnas estables: si las mínimas nocturnas superan 10‑12 °C durante una semana, tus plantones estarán a salvo.
• Fenología natural: cuando los almendros florecen y los cerezos están en plena flor, es señal de que la primavera se ha asentado y puedes plantar sin miedo a heladas.

Plantación directa vs trasplante

Semillero interior: la berenjena necesita luz abundante y temperaturas cálidas para germinar. Si planeas trasplantar a finales de mayo, comienza la siembra en semillero a finales de febrero (zona mediterránea) o a principios de marzo (zona continental). Usa sustrato con 50 % perlita y 50 % turba; mantén la bandeja en una zona con 12‑14 h de luz artificial o bajo una cubierta de plástico transparente.

Trasplante: cuando las plántulas tengan 4‑5 hojas verdaderas y el suelo esté a la temperatura adecuada, transplántalas a una distancia de 50‑60 cm entre filas y 45‑50 cm entre plantas. Asegúrate de endurecer las plántulas durante 7‑10 días, exponiéndolas gradualmente al exterior.

Siembra directa: en climas cálidos (Canarias, costas del sur) puedes sembrar directamente en el suelo a 25 °C de temperatura del sustrato. Haz surcos de 20 cm de profundidad y cubre ligeramente con tierra.

Plantas compañeras y asociaciones

• Pimiento y calabacín: comparten requerimientos hídricos y favorecen la polinización.
• Albahaca y menta: sus olores repelen la mosca blanca y algunos ácaros que atacan a la berenjena.
• Caléndula: atrae insectos beneficiosos que comen pulgones.

Evita plantar cerca de patatas (comparten el mismo nematodo) y de coles (pueden transmitir la mildiú polvoriento).

Consejos finales

• Protección contra heladas tardías: coloca una túnica de plástico o una capa de arpillera durante la primera noche después del trasplante si el pronóstico indica helada.
• Riego escalonado: permite que la capa superficial se seque antes de volver a regar; la berenjena no tolera el encharcamiento. Un riego de 5‑7 l por planta cada 3‑4 días es suficiente en climas templados.
• Fertilización: aplica abono orgánico (estiercol bien curado) al momento de la siembra y un fertilizante rico en potasio (15‑30‑15) a mitad de la temporada para favorecer la fructificación.
• Plantación escalonada: siembra en grupos de 2‑3 semanas de diferencia para disponer de cosechas continuas de julio a octubre.
• Errores comunes: no sacrificar la higiene del suelo; elimina restos de cultivos anteriores y evita el exceso de nitrógeno, que produce mucho follaje pero pocos frutos.

Conclusión

En resumen, cuándo plantar berenjena varía según la zona:

• Mediterráneo: de mediados de marzo a principios de mayo.
• Continental: finales de abril‑mayo, después del 15 de mayo en años fríos.
• Atlántico: mayo‑junio, con cosecha en otoño.
• Sur interior: abril‑mayo, con segunda siembra en junio‑julio.
• Canarias: prácticamente todo el año, salvo el periodo lluvioso.

Con estos rangos, observando las señales climáticas y siguiendo las buenas prácticas de siembra y acompañamiento, tu berenjena irá fuerte y sabrosa. Ahora solo queda armar el semillero, preparar el suelo y disfrutar de la primera cosecha. ¡Ánimo y a cultivar con confianza!