Cuándo plantar lechuga en Granada: Fechas y Consejos Locales

Cuándo plantar lechuga en Granada: Fechas y Consejos Locales

Si te preguntas cuándo plantar lechuga en Granada, la respuesta depende de la última helada, la temperatura del suelo y la intensidad del sol primaveral. En la zona sur de la Sierra Nevada y en la Alpujarra granadina, el clima seco‑cálido obliga a cronometrar la siembra con precisión para evitar que el calor abrume a la plántula. Plantar en el momento adecuado te garantiza una hoja crujiente y evita pérdidas de producción.

Mejores Fechas para Granada

En Granada continental, la última helada suele producirse entre el 15 y el 30 de abril. Por eso, la ventana más segura para colocar tus bandejas es del 5 al 20 de mayo. En esa franja, las mínimas nocturnas superan los 10 °C y el suelo alcanza entre 12 y 15 °C a 5 cm de profundidad, condiciones ideales para que la lechuga germine sin sobresaltos.

Si el año es especialmente cálido, puedes adelantar la siembra a la última semana de abril, siempre que cubras las bandejas con una manta térmica y vigiles la aparición de heladas tardías. En años fríos, pospón el trasplante hasta mediados de mayo; una capa de acolchado de paja protege el sistema radicular de posibles descensos bruscos de temperatura.

En la zona de la Vega de Granada, donde el microclima es ligeramente más templado, la lechuga puede plantarse también a finales de abril, pero siempre bajo cubierta. El verano granadino llega con temperaturas que superan los 35 °C en julio; por eso, la cosecha de verano debe limitarse a variedades de ciclo corto, sembradas a finales de junio para una recolección antes del pico caluroso.

Resumen rápido por zona:

ÁreaFecha inicioFecha finComentario
Sierra Nevada & Alpujarra5 may20 mayÚltima helada + suelo >12 °C
Vega de Granada25 abr10 mayNecesaria cubierta ligera
Área urbana (centro)10 may25 maySuelo urbano calienta antes

Calendario de Siembra en Semillero para Granada

Para que tus plantones estén listos justo a tiempo, siembra en semillero a mediados de marzo. Usa bandejas de 10 × 15 cm con una mezcla de tierra de jardín y perlita al 30 % para asegurar buen drenaje. Mantén la cubierta de un plástico perforado y coloca las bandejas en un sitio luminoso pero sin sol directo; la temperatura ideal del ambiente es 18‑20 °C.

Cuando las plántulas tengan 4‑5 hojas verdaderas (aprox. 2‑3 semanas), comienza el proceso de endurecimiento: abre la cubierta un 25 % cada día durante 7‑10 días, reduciendo la humedad y aumentando la exposición al aire libre. Así evitarás el shock al trasplantar en mayo.

Condiciones Específicas de Granada

Granada presenta un clima seco‑cálido con escasas lluvias primaverales (≈30 mm entre marzo y mayo) y ventiscas ocasionales en la zona alta. Por ello, el riego es crucial: un riego profundo cada 2‑3 días mantiene la capa superficial del suelo húmeda sin promover enfermedades. En la ciudad, el suelo tiende a ser arcilloso‑calcáreo, lo que retiene bien la humedad pero necesita enmiendas de compost bien descompuesto para mejorar la estructura y evitar la compactación.

El viento de levante puede resecar rápidamente las hojas jóvenes, así que coloca una barrera de alambre o una cerca viva de alhelí alrededor del lecho. Además, en mayo‑junio aparecen tormentas de granizo aisladas; una malla anti‑granizo ligera o una cubeta de cartón invertida protege eficazmente los plantones sin impedir la luz.

Variedades Recomendadas para Granada

  1. ‘Lollo Rossa’ – hoja rizada, tolera algo de calor y tiene buen sabor amargo que compensa la subida de temperatura en verano.
  2. ‘Batavia’ – crujiente y resistente al exceso de humedad, ideal para la zona de la Vega.
  3. ‘Crisphead’ (tipo Iceberg) – ciclo corto de 60‑70 días, perfecta si quieres cosechar antes del máximo calor de julio.

Todas estas variedades son indeterminadas, lo que permite cosechas continuas si vas plantando cada 2‑3 semanas.

Consejos Específicos para Granada

  • Acolchado de paja: coloca una capa de 3‑5 cm después del trasplante; conserva la humedad y regula la temperatura del suelo.
  • Fertilizante orgánico: una dosis de 30 g de humus por metro cuadrado cada 3 semanas aporta nitrógeno sin quemar las raíces.
  • Control de plagas: la pulguita de la lechuga (Trialeurodes vaporariorum) se controla con trampas amarillas y un chorrito de jabón potásico al 2 % dos veces por semana.
  • Rotación de cultivos: evita plantar lechuga en el mismo sitio dos años consecutivos; alterna con espinaca o coliflor para romper el ciclo de patógenos del suelo.

Conclusión

En Granada, la fecha clave para plantar lechuga se sitúa entre principios y mediados de mayo, justo después de la última helada y cuando el suelo supera los 12 °C. Si siembras en semillero a mediados de marzo y aplicas un buen endurecimiento, tendrás plantones robustos listos para el trasplante. Con riego regular, acolchado y variedades adaptadas al clima seco‑cálido, tu huerto granadino te recompensará con hojas frescas y crujientes hasta el final del verano. ¡Manos a la tierra y a cosechar!