Cuándo Plantar melón en Almería: Fechas y Consejos Locales

Si te preguntas cuándo plantar melón en Almería, la respuesta depende del calor, la humedad y, sobre todo, de la ausencia de heladas. En esta zona semiárida del sureste español, el melón necesita una larga temporada de temperaturas cálidas para desarrollar su dulzura característica. Plantarlo en el momento equivocado puede provocarte frutas pequeñas, amarillentas o, peor aún, plantas que no germinen. Por eso, en este artículo te dejo un calendario adaptado al clima almeriense, señales para reconocer el momento óptimo y trucos que he probado en mi huerto de la zona.

Mejores fechas para Almería

En la costa de Almería el invierno es corto y la temperatura del suelo raramente baja de 12 °C después de febrero. Sin embargo, la última helada típica ocurre entre el 15 y 25 de marzo, y todavía pueden aparecer chubascos fríos. Por ello, la ventana segura para trasladar los melones al exterior empieza a mediados de abril y se extiende hasta principios de junio.

• Primera fase (semillero): siembra en interior a finales de febrero o primera semana de marzo. Así tendrás plantones listos para plantar al aire libre cuando el suelo alcance 18 °C a 5 cm de profundidad.
• Trasplante al campo: la fecha ideal es la segunda quincena de abril (del 10 al 25), cuando las mínimas nocturnas superan ya los 13 °C y el riesgo de helada se ha disipado.
• Segunda plantación: si prefieres una cosecha más tardía, puedes colocar plantones entre mediados de mayo y principios de junio; el calor del verano garantirá un buen desarrollo, aunque tendrás que vigilar el riego.

En años especialmente cálidos, es posible adelantar el trasplante una semana más, siempre que mantengas una cubierta ligera (campana de plástico) para proteger las raíces de un posible golpe de frío nocturno. En años fríos, pospón el traslado hasta que el suelo mantenga 16 °C de forma constante durante al menos una semana.

Calendario de siembra en semillero para Almería

Para que tus melones estén listos a tiempo, planta las semillas en bandejas o macetas a finales de febrero. Usa una mezcla ligera de tierra de jardín + perlita (2:1) y mantén la humedad en 80 %. Coloca las bandejas en un sitio luminoso pero sin sol directo, con una temperatura ambiente de 20‑22 °C.

Cuando las plántulas tengan 4‑5 hojas verdaderas (aprox. 3‑4 sem después de la germinación) empieza el proceso de endurecimiento: expónlas al aire libre 1‑2 h al día, aumentando gradualmente hasta 6‑8 h. Hazlo durante 7‑10 días antes del trasplante definitivo en el huerto. Este paso es crucial para evitar el shock por el sol y el viento.

Condiciones específicas de Almería

Almería posee un clima semiárido con escasas lluvias (≈ 200 mm al año) y veranos que llegan a 40 °C. El suelo suele ser arenoso‑lutoso, con buen drenaje pero bajo contenido orgánico. Por ello, antes de plantar:

• Enmienda del sustrato: incorpora 2 kg de humus de lombriz o estiércol bien descompuesto por cada m³ de tierra. Esto aumenta la retención de humedad y aporta nutrientes esenciales.
• Riego: los melones necesitan 30‑40 l por planta a la semana en primavera, incrementando a 50‑60 l cuando el día supera los 35 °C. Prefiere riegos profundos y poco frecuentes (cada 2‑3 días), evitando el encharcamiento que favorece la pudrición de raíces.
• Viento: los vientos del Levante pueden dañar las enredaderas jóvenes. Instala una barrera viva (p. ej., mezquite o encinas) o coloca tutores de 1,5 m bien anclados antes de que la planta empiece a ramificarse.
• Sombras temporales: durante olas de calor extremo, protege las plantas con mallas de sombra (30 % de reducción de luz) durante las horas centrales del día.

Variedades recomendadas para Almería

No todas las variedades de melón resisten el calor desértico. En mi huerto de Almería he probado con buenos resultados las siguientes:

• ‘Galia’: melón de piel reticulada, tarda poco en madurar y tolera temperaturas de hasta 38 °C.
• ‘Charentais’: de pulpa aromática, con buen rendimiento en suelos arenosos y alta resistencia a la sequía.
• ‘Piel de Sapo’ (o ‘Melón de Castilla’): variedad española que soporta bien el sol intenso y produce frutos grandes y dulces.
• ‘Nador’: adaptación tradicional al sur de España, muy resistente a la humedad excesiva y a los ataques de mosca del melón.

Escoge una variedad indeterminada si deseas una cosecha prolongada (julio‑octubre) o una determinada para una cosecha puntual en agosto.

Consejos específicos para Almería

• Mulching: cubre el suelo alrededor de la planta con paja o plástico negro. Reduce la evaporación y mantiene la temperatura del sustrato estable.
• Fertilización: aplica 50 g de fertilizante equilibrado (N‑P‑K 10‑10‑10) al momento del trasplante y repite a los 30‑45 días con un fertilizante rico en potasio (K) para favorecer la formación del fruto.
• Control de plagas: la mosca del melón es frecuente en la zona. Coloca trampas de cuenco con atrayente de melaza y revisa semanalmente. Un spray de neem al 1 % es eficaz y respetuoso con los insectos beneficiosos.
• Cosecha: los melones están listos cuando la cáscara adquiere un tono amarillento y la zona de la base se vuelve blanda al tacto. Corta la fruta con un cuchillo afilado, dejando un pequeño tallo para prolongar la vida postcosecha.

Conclusión

En Almería, la mejor época para sembrar melón se sitúa entre la segunda mitad de abril y principios de junio, siempre que el suelo supere los 18 °C y hayas protegido la plantación de cualquier última helada. Con una preparación adecuada del sustrato, riegos profundos y la elección de variedades como ‘Galia’ o ‘Charentais’, tendrás una cosecha abundante y dulce que rescata todo el sabor del verano almeriense. ¡Manos a la tierra y disfruta de esos melones jugosos bajo el sol del Levante!